Afortunadamente hay muchas cosas que el paso del tiempo va cambiando para mejor. Una de ellas tiene que ver con el amor y con la tradición de pedir la mano de la novia a la hora de contraer matrimonio.
Hasta hace no muchos años atrás era muy común que si un hombre deseaba casarse con una mujer, indefectiblemente tenia que presentarse ante el padre de la pretendida y pedirle formalmente su mano, ya que el progenitor de la muchacha era quien decidía si la damisela podía casarse o no con el pretendiente, algo que claramente dejaba fuera a la mujer en este acto, ya que no tenía prácticamente voz ni voto.
Con una tradición que llegaba desde la Antigua Roma, básicamente, el acto de pedir a un padre la mano de su hija para casarse, era sinónimo de solicitar la potestad y el control sobre ella. Una costumbre machista que trataba a la mujer casi como una mercancía. Por suerte y mas allá de que esta costumbre todavía sigue vigente en algunas culturas, esto se practica cada vez menos y se cambio el método por la de directamente pedir la mano a la novia. https://www.lacoope.net/lacoope/nota/amazon-esta-desarrollando-una-serie-de-god-of-war
La parte clásica muestra al novio quien, rodilla al piso y portando un anillo de compromiso, le pregunta a su amada el famoso ¿quieres casarte conmigo?. La parte no tan clásica, es el lugar, el momento y la situación que rodea a esta pregunta. Con el romanticismo y la imaginación a flor de piel, son muchos los que han pedido matrimonio al amor de sus vidas de una forma excepcional, y éste que te contamos es un caso mas que entra en la lista.
La invasión de Ucrania por parte de Rusia sin dudas que es el tema del día, pero dentro de las muchas tristes imágenes que el mundo recibe de esta guerra, hay otras emotivas situaciones y momentos que llegan de vez en cuando, como el caso de este soldado ucraniano que detuvo el coche en el que iba su novia y fingió un control para pedirle matrimonio.
El romántico momento tuvo lugar en la ciudad ucraniana de Fastiv y se viralizó rápidamente en las redes. Allí, un soldado ucraniano y en complicidad de sus compañeros, montó un control de rutina para detener el auto en el que viajaba su enamorada junto a otros acompañantes. En el video se ve a los cuatro pasajeros apoyados en el vehículo para ser cacheados, hasta que en un momento uno de los militares que llevaba su rostro cubierto, se arrodilló y pidió a una de las pasajeras que se girara. Al hacerlo, ella se dio cuenta de que quien la estaba sometiendo a un control, era su novio.
El enamorado soldado iba provisto además de su equipo militar, con un ramo de flores y un estuche con un anillo, armas infaltables a la hora de pedir matrimonio. Acto seguido entre llanto y abrazos y mientras la escena quedaba registrada por los móviles de los presentes, la pareja se trasladó a un puesto de control de Kiev en donde celebraron una boda improvisada. https://www.lacoope.net/lacoope/nota/madrid-es-lo-nuevo-de-fabro-y-fmk