Pagó $2.9 millones de dólares por un NFT y quiso subastarlo, esto le ofrecieron

El boom de los NFT ya no está al mismo nivel que el de aquellos tiempos en donde se pagaban sumas millonarias por un token que representase el primer mensaje de la historia en Twitter

15 Abril de 2022 - 09:28

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Sina Estavi, emprendedor del mercado crypto, pagó el año pasado $2.9 millones de dólares por un NFT que representaba el primer mensaje de la historia de Twitter. Se trata un simple tweet del co-fundador de la compañía, Jack Dorsey, planteando que estaba configurando su cuenta.

Ahora el inversionista intentó subastar el token digital por $48 millones de dólares, lo que representaba un aumento de un 1555,17% del valor original del NFT. Sin embargo, su objetivo no fue cumplido. Más aún, le ofrecieron una suma insignificante en comparación a su inversión. https://www.lacoope.net/lacoope/nota/2021-12-8-11-17-16-babasonicos-presenta-su-primera-coleccion-de-nfts

El portal Kotaku recuperó una historia de CoinDesk que plantea que Estavi inició la subasta el pasado 9 de abril, planteando que su objetivo era donar alrededor de la mitad de lo recaudado a una obra benéfica.

No obstante, la primera gran oferta por el NFT alcanzó a los $277 dólares y posteriormente la suma de la subasta solo llegó a los $3.600 dólares. La inversión directo al precipicio.

Esta situación es otro indicador horroroso para el mercado de los tokens digitales, ya que en los últimos meses el mercado de los NFT se ha frenado de forma bastante llamativa. De hecho, un tercio de los NFT perdieron todo su valor según un estudio.

En ese sentido, Estavi aseguró que, pese a que el tiempo de la subasta ya terminó, podría eventualmente aceptar “una buena oferta”. Claro, si es que esta llega de milagro. https://www.lacoope.net/lacoope/nota/2022-1-18-10-46-33-keith-richards-subasta-su-guitarra-gibson-y-un-nft-con-fines-beneficos

El otro detalle interesante de la historia es que Estavi fue liberado recientemente de prisión, ya que estuvo encerrado nueve meses en Irán bajo los cargos de “interrumpir el sistema económico”. También está en la mira de otros inversionistas, ya que dos de sus aventuras en las criptomonedas fracasaron colosalmente, incluyendo al token digital BRG y el cierre de su exchange CryptoLand. De ahí que no pocos ponen en duda su objetivo de entregar parte del dinero de la subasta del NFT de Twitter a una obra benéfica.